Cuando iniciamos un proyecto de decoración, es muy importante comunicarnos con el cliente para saber exactamente cuáles son sus deseos y expectativas. Qué espera transmitir, cómo quiere sentirse, etc.
En este salón del barrio de Horta, queríamos sobre todo tener una sensación de amplitud en un espacio no muy grande. Un espacio polivalente, bien para el descanso o para reuniones con familia y amigos. Hemos conseguido con la elección del mobiliario tener comodidad y amplitud con un sofá de dimensiones generosas que permite echarse cómodamente en él, a la vez que ofrece varias plazas para sentarse permitiendo además, el contacto visual que tanto favorece la conversación.
La elección de los puffs como mesas de centro, permite ofrecer un espacio más liviano, cálido y acogedor al salón. Cumplen con varias funciones, la de mesa y la de asiento. Además sus formas redondas favorecen la circulación evitando posibles y molestos choques con las esquinas, sobre todo en espacios un tanto justos.
Y por último, un aparador para dar solución a problemas de almacenamiento. En este caso optamos por este colgado de la pared. Así al verse el suelo la sensación de amplitud aumenta. El resultado es un salón con una atmósfera muy confortable y acogedora. Potenciando la luz natural a través de las cortinas, el color de las paredes, del suelo y del mobiliario. Recibiendo y acogiendo con comodidad a las personas que habitan o visitan la vivienda. Un espacio ordenado con equilibrio, simetría y limpieza.